Querido empresario, querido emprendedor, querido dueño de marca, ¿has hecho la tarea alguna vez con respecto a eso que comercializas, con respecto a tu gran idea, a tu sueño tangible, ese que quieres y anhelas que todo el mercado conozca?
Verás, con hacer la tarea me refiero a estudiar y conocer desde la raíz eso que quieres publicar o promocionar (sí, esa tarea te corresponde, no le corresponde a la agencia, al community manager, al
diseñador, es importantísimo que tú querido empresario, emprendedor, dueño de marca lo tengas claro para que la agencia, el community manager y/o el diseñador pueda estar alineado a eso que tú has dicho que es tu marca).
¿Crees que es tedioso?, ¿te da flojera? Pues bien y entonces es importante recalcar que este tipo de tarea, de conocimientos (y claridad), resulta fundamental para crear campañas exitosas, no tienes oportunidad de generar o que alguien genere algo brillante o relevante a menos que investigues a fondo y tengas en claro que hace de tu marca de especial, de único, de importante para aquel que entra en contacto con ella. Al menos y como punto básico es necesario que tengas en claro:
Que hace el producto y para quien es. ¿Por qué?, porque hay miles de productos, de personas y de ideas allá afuera que son similares a la tuya, y seguramente muchas de ellas conocen perfectamente estos tres puntos:
• ¿Qué es lo que ofrecen al mercado?
• ¿Cuáles son los atributos tangibles de su propuesta de valor? (peso, tamaño, color, textura, duración, etc.)
• ¿Cuáles son las necesidades que son satisfechas? (hambre, sed, descanso, compañía, etc.)
Contestar estas tres preguntas (sin romanticismos por favor, en palabras concretas), serán de gran ayuda para clarificar eso que comercializas, para generar ideas de campañas con directriz, bien pensadas, generadoras de experiencias, una publicidad bien hecha, recuerda, si tu publicidad se ve barata, esta repercutirá en tu producto-servicio-proyecto. Para reflexionar un poquito ¿Usarias, recomendarías o comprarías un producto barato o mal hecho?... Obviamente no.
Aunque vendas carne, fierros, comida china, servicios de veterinaria, cada uno de ellos tiene particularidades, peculiaridades, “magia” si es que quieren decirlo de manera barroca y elegante, que los hace diferenciarse de sus competidores. Si piensas que tu producto es aburrido o que no hace nada diferente… te tengo noticias. No hay productos aburridos, solo hay escritores aburridos, hay dueños de marca aburridos, emprendedores aburridos y empresarios aburridos que creen que la verdad de su marca está afuera o que alguien más va a venir a dictárselas.
Sad but true.
Y bueno acá un ejemplo maravilloso de como sí se pueden generar experiencias y diferenciarse (aún en giros en los que parece que todo está dicho y hecho), Wagamama Takeout Experience, por parte de los señores de Pearlfisher en Londres, haciendo gala y maestria de Brand Design en la categoría de empaque.
Macu. Kitschmacu.