Solía escribir mucho, hace un tiempo... era en ese entonces un proceso fluido y natural. En el transcurso de los años fui colocando presas a ese caudal, hasta hacerlo como hoy en día: escaso y embalsado.
Las palabras, y los sentimientos que ellas guardan, hoy duelen de tanto estar ahí, esperando para otros (mejores) momentos, haciendo reservas de historias, de anhelos, dejando las palabras en la cabeza, que flotan como las nubes en el cielo, esas nubes que no sueltan las gotitas de lluvia y solo están ahí, contenidas, cargadas, esperando sin llegar, sin mojar, ni nutrir, sin dar vida.
Así se sienten las palabras hoy, suspendidas en un desfiladero de emociones de hormigón que construí para no sentirme vulnerable.
Hoy, el hormigón se resquebraja, hoy necesito la primera lluvia, las primeras letras, el asomo de emociones... dejar de ahogarme en el silencio.
Macu.Kitschmacu