Y bueno empezaré mi relato diciendo que, tengo un celular
Huawei que compré el año pasado (2018) en Japón, a razón de que mi entonces
siempre estimado Galaxy Note decidió auto extinguir su existencia de aquel lado
del mundo.
Fueron dos las razones principales por las que decidí dar
por terminada mi hasta entonces impoluta fidelidad con Samsung:
1. El vendedor se mostró verdaderamente interesado
en sugerirme un celular que pudiera utilizar de regreso en mi país, plus que su
inglés era bastante bueno y pudimos entablar una profunda y sentida
conversación, donde el buen hombre comentaba las características y ventajas del
equipo, a la par que yo compartía mi frágil estado tecno-emocional después del
harakiri de mi Note. Un verdadero contacto de almas. Sellado con la alianza eterna
de mi tarjeta de crédito aprobada.
2. El Huawei que el atento hombre me vendía estaba
equipado con dos hermosísimas cámaras Leica. El cielo y sus pixeles en la palma
de mi mano.
En fin, necesitaba contar mi idílica historia después de que
Google y Huawei rompieron relaciones ayer (19-05-19) y que mi celular, que mi usabilidad y
experiencia de usuario se verán comprometidas por las no actualizaciones que no
habrán de llegar. Drama.
Un placer, y bueno comparto con ustedes una campaña del P30
en España, un paralelismo medio raro entre compartir carga al contacto y el
breastfeeding, decidieron “normalizar” lo extraordinario, pues la energía está
hecha para compartirse, en fin la campaña fue creada por M&C Saatchi en
España para Huawei para la categoría de Electrónica y Tecnología.
Gracias por pasar al Blog
Gracias Huawei, fue lindo mientras duró
Macu.Kitschmacu.