El nuevo logo de Panamá es
funcional, sí… amable lector no tendrá usted que llegar hasta el final de este
post para que en los últimos renglones exprese yo mi opinión. (muerto el niño a tapar el pozo).
Hace
algunas semanas, restaurantes y pastelerías Panamá, nos sorprendía con un cambio
bastante radical en su imagen: color, forma, estructura, tipografía, elementos
ausentes y nuevos elementos presentes.
Cundió
el pánico.
¿Por
qué desde mi punto de vista es un cambio funcional?, la organización ha
expresado sus planes de crecimiento para los periodos venideros, un crecimiento
que contempla la expansión fuera de la región que nosotros sinaloenses, bien
conocemos. Hay más mundo allá afuera, y ese nuevo mundo hay que conquistarlo. Esta
conquista no se realizará con un logotipo que si bien es cierto resulta
entrañable para los que estamos familiarizados con él, en un nuevo mercado es
pues un logotipo pasado de moda y cargado, que los deja en franca desventaja.
El
nuevo distintivo en color rojo preponderante, enmarcado en un rectangulo cuyas
bases superior e inferior ostentan un volumen que hace que la atención del ojo
se vaya al centro de la figura, permitiendo sí el deslizamiento eficaz y
concreto de la lectura al texto principal: Panamá, para luego proceder con un
pequeño escalón visual señalado por la franja blanca debajo del texto primario,
y que dirige en segunda instancia al escrito: Restaurante y Pastelería, dos
palabras descriptivas de los giros que atiende la empresa, especificación
bastante útil cuando se es el chico nuevo en la ciudad.
En la
palabra Panamá en el nuevo diseño, han sustituido el acento propio de la
tipografía por un corazón, elemento que
en lo particular en la forma utilizada me parece forzado, como si no terminara
de llegar o de caer a la palabra (llego o no llego, estoy o no estoy, piso o
corro), nuevamente a gusto personal hubiera preferido el corazón en su forma
original, sin ese aspecto de tilde dubitativa. Intuyo que el uso de esta figura sea el de fungir como preámbulo y liga para que, de manera sutil y sugerente empiece el
proceso de familiarización y ancla a la nueva frase “sabor con amor” ("buena" frase, cortita, con intentos de ser llegadora y funcional (así en plano, porque no da más, es una liga que ya no estira)).
El
buen Pana ha dejado de surfear sobre la ola del logotipo antiguo para
convertirse en un “ser” aparte, una mascotita que se presenta ahora
rejuvenecida, sonriente y optimista. Soy de la idea que una mascota es un
elemento poderoso para las marcas y que no todas tienen la “fortuna” del
desarrollo y contribución de una (no a todos les queda tener mascota, vaya). Resulta
imperioso que el buen Pana, comience a hablarnos del futuro, ¿Qué viene de
nuevo para la marca?, ¿hacia donde?, ¿en cuanto tiempo?, ¿por qué sí?, ¿Qué sucede
de manera interna en la organización de lo cual él se siente sumamente
orgulloso y quiere que yo usuario de marca esté también enterado?, señores
tienen todo para inspirarnos y emocionarnos, un pasado glorioso, un futuro
prometedor y con visión, productos, historias de productos… la figura,
presencia, temperamento, carácter e historia de Pana, cual metal en torno, se
desgasta en redes, la ilustración, el léxico, el tiempo… se pierde en
respuestas tontas y “graciositas” a comentarios desafiantes en facebook (acá una muestra: https://goo.gl/F6uk9J puede usted hacer click sobre la liga amable lector). Seguramente
dirán: “queremos empatizar con los usuarios que se han mostrado reacios al
cambio, ¿qué mejor empatía que el humor?”. Aquí yo digo no.
Premisa básica:
¿Quieres que te quiera? Primero necesito respetarte, no te puedo querer si no
te respeto. Y no te voy a respetar si juegas a hacerte el payaso. Te respeto porque eres grande, porque tienes presencia, porque marcaste pauta, porque has
forjado historia, porque abriste mercado, porque generas empleos, porque es una
experiencia sensorial estar en los puntos de venta, porque he pasado desayunos,
cumpleaños, cenas contigo…pregúntale a tus clientes porque te respetan y sabrás porque te quieren.
Pana-Panamá, no necesitan jugar al payaso, porque en ese juego va de por medio
la personalidad de marca, de verdad, créanme, no necesitan tratar así su historia y la construcción de marca de todos los años pasados, no es borrón y cuenta nueva, es construir, honrar y respetar pilares muy firmes que permiten este cambio.
El
cambio ha suscitado reacciones, sin embargo cualquier cambio que resulte así de
disruptivo los ocasiona. Para un presente "revuelto" que clama por un pasado conocido, es necesario mostrar el futuro por el cual se trabaja. Auguro un buen porvenir. Que terminará por ser percibido y "redondeado" una vez que la implementación
concluya (de cabo a rabo): uniformes, fachadas, decoración,
paleta de colores (no más paleta de unicornio por favor), menús, etc.
Bien.
Buen
y cálido cambio.
Macu.
Kitschmacu.
Pd1. Dejen los memes por piedad.
Pd2. Dejen los comentarios sin sentido y que ningunean al consumidor en facebook
Pd3. Si tu community manager no respeta la marca... ¿por qué habré de respetarla yo?. Respeto por respeto.
Pd4. Tienes historia... es necesario empezar a respetarla, esa es una "vara" que no debe de quebrarse. Porque si se quebra, rompes con la gloria.
Pd1. Dejen los memes por piedad.
Pd2. Dejen los comentarios sin sentido y que ningunean al consumidor en facebook
Pd3. Si tu community manager no respeta la marca... ¿por qué habré de respetarla yo?. Respeto por respeto.
Pd4. Tienes historia... es necesario empezar a respetarla, esa es una "vara" que no debe de quebrarse. Porque si se quebra, rompes con la gloria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario